La Burriquita de Trino, danza llena de color y alegría, donde mujer y burra son las protagonistas de la fiesta popular. Ella, con su falda multicolor, criznejas, sombrero y su burra traviesa, contagia a todos con su gracia y su simpatía. Es una tradición que celebra la diversidad, creatividad y humor de nuestro pueblo, que supo mezclar sus raíces indígenas, africanas y españolas en una expresión única y original.
En las carnestolendas de Guarenas, por allá en 1936, se escuchaba la alegre retreta de la música cañonera, mientras los pobladores se alistaban para dar comienzo al desfile que recorrería las principales calles del pueblo. En la Plaza la Candelaria, todos esperaban impacientes para observar aquel desborde de colores, pero en especial, para disfrutar de la Burriquita de Trino.
Y es que Laureano «Trino» Navarro, hizo de su burra una tradición en Guarenas, cuando sin falta venía desde Curupao con su cargamento de alegría durante los tres días que precedían al Miércoles de Ceniza.
Laureano nació en Guarenas el 4 de julio de 1917, hijo de María de la Cruz Navarro. El 21 de noviembre de ese mismo año, recibió las aguas bautismales del padre Román Banaques, siendo sus padrinos Felipe González e Irene Muñoz.
Fue un hombre alegre, quien maraca en mano bailaba a la burra para el deleite de los guareneros, en una época en que muchos pensaron que esa expresión era solo una forma de transitar los carnavales, sin imaginar que Trino era en realidad un maestro de tradición.
La forma dicharachera, educada y afable de Laureano lo hicieron meritorio del respeto y cariño de los moradores, siendo reconocido como pionero de esta manifestación folclórica en Guarenas, la cual mantuvo como tradición viva para su continuidad en el tiempo.
Ejemplo de ello es el cultor Manuel Fernando Sánchez, quien desde 1995 y contando con siete años de edad se inició como pollino de esta expresión cultural, la cual ha mantenido con amor y orgullo mientras lleva sus colores, baile, pantomima y alegría a todos los rincones de Guarenas. Él es uno de los herederos de la tradición proveniente de Laureano «Trino» Navarro.
La Burriquita, patrimonio cultural de Venezuela, es una fiesta popular que nos invita a la participación y a la alegría, es una forma de reírnos mientras le hacemos frente a la adversidad, reafirmando así nuestra identidad cultural. Más que un baile, La Burriquita es una forma de celebrar la vida.
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Fundador y editor de Campanario Urbano. Docente y director jubilado. Investigador de la historia de Guarenas. Fue cronista de prensa regional y apasionado coleccionista de fotografías y documentos antiguos.