Imagen de San Pedro de Guarenas

La Guarenas de antaño basaba su economía en el cultivo de caña dulce, producción de papelón, melaza y aguardiente. En ese ambiente con olor a melaza se le rendía tributo a una Imagen de San Pedro

La tierra fértil de esta noble tierra dejaba ver aquellos tablones con cuadras de 100 varas en hileras muy derechas, las cuales cada año brindaban una inmejorable zafra.

Gracias a las haciendas de trapiche y sus majestuosos ingenios, Guarenas fue un importante sitio de producción y procesamiento de este rubro.

Hacienda El Cercado
Hacienda El Cercado

Estas haciendas no solo mantuvieron la economía de Guarenas, sino que dibujaron y delimitaron nuestra geografía, establecieron una estructura social y fueron sitio de origen de tradiciones religiosas y culturales.

Las haciendas de trapiche tenían en su construcción un área destinada a la actividad papelonera y otra parte relacionada al área residencial.

Casa Grande de la Hacienda La Concepción, sitio de la actual Iglesia Nuestra Señora de Coromoto, Guarenas.
Casa Grande de la Hacienda La Concepción, sitio de la actual Iglesia Nuestra Señora de Coromoto, Guarenas.

Pero también tenían una capilla como espacio sagrado y de uso común, tanto para propietarios como capataces, peones y esclavos.

Capilla de la Hacienda Casarapa, año 2021
Capilla de la Hacienda Casarapa, año 2021

Una vez al año, el día de la botada, se reunían todos en la capilla para asistir a la misa, orando por ese primer día de caña madura.

Posteriormente y con total solemnidad, todos visitaban la casa de molienda, donde el cura bendecía al ingenio de trapiche.

Las haciendas de Guarenas rendían devoción a la bondad de un santo o a la Virgen María.

La Hacienda Casarapa rendía tributo a San Juan Bautista, ante cuya imagen los jornaleros cantaban y bailaban al son del tambor en las vísperas del 24 de junio.

Imagen de San Juan Bautista en la capilla de la Hacienda Casarapa, año 2021
Imagen de San Juan Bautista en la capilla de la Hacienda Casarapa, año 2021

En la Hacienda La Concepción, su propietario José Vicente Bello, y luego su hijo José María Bello González, se ampararon bajo la tutela de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen.

Noria, acueducto y acequia de la Hacienda La Concepción, Guarenas, década 1970.
Noria, acueducto y acequia de la Hacienda La Concepción, Guarenas, década 1970.

En la Hacienda El Carmen, sus propietarios y jornaleros fueron devotos de esta advocación mariana.

Torreón de la Hacienda El Carmen, año 2021
Torreón de la Hacienda El Carmen, año 2021

Por su parte, para finales del siglo XVIII, la Hacienda San Pedro de Guarenas albergaba en su capilla una imagen de San Pedro Apóstol, sentado en un trono dorado, vistiendo un alba blanca, casulla y palio rojos, mitra y báculo dorados.

Imagen de San Pedro Apóstol, Catedral de Nuestra Señora de Copacabana de Guarenas.
Imagen de San Pedro Apóstol, Catedral de Nuestra Señora de Copacabana de Guarenas.

En esa capilla y ante esa imagen de San Pedro Apóstol, nos cuenta la tradición que la esclava María Ignacia rezó y suplicó por la sanación de su hija Rosa Ignacia, la cual padecía de una fiebre muy alta que los curanderos no lograban bajar, y si él le concedía el milagro ella le prometía bailar y cantar ante él cada año el día de su santoral.

Ramón Noria, cultor de la Parranda de San Pedro de Guarenas, quien interpreta a María Ignacia
Ramón Noria, cultor de la Parranda de San Pedro de Guarenas, quien interpreta a María Ignacia

El milagro se hizo, la fiebre desapareció y Rosa Ignacia se salvó. Así nació la tradición de la Parranda de San Pedro.

El 29 de octubre de 1900, Guarenas recibió el impacto de un terrible terremoto que dejó tristes huellas en la población.

Samán de la antigua Plaza del Pueblo Arriba de Guarenas, luego Plaza Bolívar, año 1900.
Plaza del Pueblo Arriba de Guarenas después del terremoto del 29 de octubre de 1900.

La capilla de la Hacienda San Pedro no fue ajena a los embates de este fenómeno natural, quedando prácticamente en ruinas. Pero la imagen de San Pedro Apóstol no sufrió daño alguno.

Norial de la Hacienda San Pedro de Guarenas, década de 1970.
Norial de la Hacienda San Pedro de Guarenas, década de 1970.

El propietario de la hacienda para esa época, Don Carlos Bello, le pidió al propietario de la Hacienda vecina El Carmen que por favor albergara en su capilla a la imagen de San Pedro.

Para esa época, Norberto Blanco trabajaba en la Hacienda El Carmen y fue testigo del traslado de esta imagen milagrosa.

Norberto Blanco († 1937), cultor de la Parranda de San Pedro de Guarenas
Norberto Blanco († 1937), cultor de la Parranda de San Pedro de Guarenas

Norberto Blanco participaba cada año en la Parranda de San Pedro, siendo él un importante cultor que mantuvo la tradición en Guarenas, celebrándola de la forma original en que la hicieron los esclavos promeseros décadas atrás.

A menos de un año de ese terremoto, el 5 de julio de 1901 nació en la Hacienda El Carmen Don Antonio Núñez.

Antonio Núñez (05/07/1901 - 05/02/1987), Parranda de San Pedro de Guarenas
Antonio Núñez (05/07/1901 – 05/02/1987), Parranda de San Pedro de Guarenas

Aquel hijo de Guillermina Núñez, nacido seis días después de la Parranda de San Pedro, fue a quien la fe, el compromiso y la historia lo convertirían en el inolvidable sampedreño, el parrandero mayor de Guarenas.

Años más tarde, la imagen de San Pedro le fue entregada al Señor Juan «Marielías» Aponte, quien se desempeñaba como «saquero» de la Hacienda San Pedro. Juan Aponte resguardó la imagen en su casa de la calle Sucre, número 19.

Cada año, en las vísperas de la Fiesta de San Pedro, la imagen era trasladada entre rezos desde La Llanada hasta la Iglesia Nuestra Señora de Copacabana, donde era bellamente ornamentada para su procesión del 29 de junio.

Esta procesión, que se realiza después de la Misa y alrededor de la Plaza Bolívar, es una de las características distintivas de la Parranda de San Pedro celebrada en Guarenas.

Procesión San Pedro de Guarenas, 29 de junio de 1988
Procesión San Pedro de Guarenas, 29 de junio de 1988

Los guareneros escuchaban con emoción los versos improvisados por Norberto Blanco y los sampedreños.

Al día siguiente y culminada la celebración, la imagen volvía a la casa del Señor Juan Aponte.

En 1937, en su lecho de enfermo, Norberto Blanco le entregó la Parranda de San Pedro de Guarenas a Don Antonio Núñez.

Imagen de San Pedro Apóstol, Catedral de Guarenas
Imagen de San Pedro Apóstol, Catedral de Guarenas

El Señor Juan Aponte antes de morir, le entregó la imagen de San Pedro a Don Antonio Núñez.

Ahora las festividades del San Pedro de Guarenas eran organizadas por los cultores Antonio Núñéz, Leoncio Campos y Manuel Antonio Muro.

La imagen de San Pedro sería resguardada por Don Antonio Núñez en su casa de la calle comercio.

En 1939, Antonio Núñéz, Leoncio Campos y Manuel Antonio Muro conversaron con el Padre Rafael Antonio García, con la finalidad de entregar la imagen de San Pedro Apóstol al que sería su recinto definitivo: La Iglesia de Nuestra Señora de Copacabana, hoy Catedral.

Catedral Nuestra Señora de Copacabana, Guarenas, año 1979
Catedral Nuestra Señora de Copacabana, Guarenas, año 1979

En décadas posteriores, Erasmo Núñez se encargó cada año de los preparativos de la imagen de San Pedro.

Erasmo Núñez (†) encargándose de los arreglos de la imagen de San Pedro de Guarenas, junto a su sobrino Gabriel Núñez, Catedral de Nuestra Señora de Copacabana.
Erasmo Núñez (†) encargándose de los arreglos de la imagen de San Pedro de Guarenas, junto a su sobrino Gabriel Núñez, Catedral de Nuestra Señora de Copacabana.

Luego de la muerte de Erasmo Núñez, la imagen de San Pedro Apóstol ha sido preparada para su procesión por las familias Núñez y Noria, contando siempre con la ayuda de los feligreses.

Así mismo, muchos guareneros han ofrendado nuevos ropajes para el Santo como tributo por los milagros recibidos.

Imagen de San Pedro Apóstol, Catedral de Guarenas
Imagen de San Pedro Apóstol, Catedral de Guarenas

Es así como la tradición nos dice que ante esta imagen de la Hacienda San Pedro de Guarenas la promesera María Ignacia rindió tributo.

Misma imagen que sería recibida por el gran sanpedreño Norberto Blanco en la Hacienda El Carmen de Guarenas.

Imagen milagrosa que fue testigo del nacimiento en esa hacienda del parrandero mayor Antonio Núñez.

Es el San Pedro Apóstol que estuvo bajo el cuidado de Juan Aponte en La Llanada de Guarenas.

El Santo Patriarca que se dejó resguardar en la casa de Antonio Núñez.

Imagen de San Pedro que sin abandonar a los guareneros encontró finalmente su lugar sacro en la Catedral de Nuestra Señora de Copacabana.

Ícono sagrado, que bajo su mirada misericordiosa, Pablo Núñez asumió la conducción de la Parranda de San Pedro de Guarenas, honrando la promesa depositada en su padre.

La imagen de San Pedro de Guarenas, es historia, tradición y fe.

Video: La Imagen de San Pedro, una Historia de Tradición y Fe

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